Las hormonas no solo influyen en la menstruación o el embarazo; también afectan el metabolismo, la piel, el sueño y las emociones. Conocer cuáles son las principales hormonas femeninas y qué papel desempeñan puede ayudarte a detectar desequilibrios y mejorar tu calidad de vida.
Son las principales hormonas sexuales femeninas. Se producen principalmente en los ovarios y están presentes durante toda la vida reproductiva de la mujer.
Funciones:
Regulan el desarrollo de las características sexuales secundarias (como senos y caderas).
Controlan el ciclo menstrual.
Preparan el útero para un posible embarazo.
Mantienen la salud ósea, cardiovascular y de la piel.
Se produce después de la ovulación en el cuerpo lúteo (una estructura temporal en el ovario) y también durante el embarazo en la placenta.
Funciones:
Prepara el endometrio para la implantación del óvulo fecundado.
Mantiene el embarazo en las primeras etapas.
Regula el ciclo menstrual en la segunda mitad del ciclo.
Producida por la glándula hipófisis, estimula el crecimiento y maduración de los folículos ováricos.
Funciones:
Controla el desarrollo de los óvulos.
Regula la producción de estrógenos.
Inicia el ciclo menstrual.
También secretada por la hipófisis, trabaja junto con la FSH.
Funciones:
Desencadena la ovulación.
Estimula la formación del cuerpo lúteo.
Participa en la producción de progesterona.
Liberada por la hipófisis anterior, es esencial durante el embarazo y la lactancia.
Funciones:
Estimula la producción de leche materna.
Participa en la regulación del deseo sexual.
Puede afectar la ovulación si se encuentra elevada fuera del embarazo.
Aunque es una hormona masculina predominante, también se produce en pequeñas cantidades en los ovarios y glándulas suprarrenales femeninas.
Funciones:
Contribuye a la libido (deseo sexual).
Participa en la producción de glóbulos rojos y masa muscular.
Influye en el estado de ánimo y los niveles de energía.
Aunque no son hormonas sexuales, su equilibrio es vital para la salud hormonal femenina general.
Funciones:
Regulan el metabolismo.
Afectan el ciclo menstrual.
Influyen en la fertilidad y el embarazo.
Las hormonas femeninas son fundamentales para el correcto funcionamiento del cuerpo, no solo en términos reproductivos, sino también en el equilibrio físico y emocional. Alteraciones hormonales pueden provocar síntomas como cambios de humor, menstruaciones irregulares, infertilidad o fatiga. Por eso, es importante acudir a chequeos ginecológicos regulares y consultar a especialistas si se presentan signos de desequilibrio hormonal. En las Unidades Médicas especializadas en salud de la mujer podemos ayudarte a evaluar tu perfil hormonal y brindarte el tratamiento adecuado para cuidar tu bienestar integral.
